Después de ocho años, los resultados de la Iniciativa de la Franja y la Ruta son problemáticos. El incremento de la conectividad e integración va de la mano con las sospechas y preocupaciones de los países cercanos y lejanos.
Después de ocho años, los resultados de la Iniciativa de la Franja y la Ruta son problemáticos. El incremento de la conectividad e integración va de la mano con las sospechas y preocupaciones de los países cercanos y lejanos.
Para comprender el porqué de las nuevas rutas de la seda, debemos mirar el mundo globalizado a través de los ojos de China, conocer sus problemas, necesidades y aspiraciones. En este contexto, los intereses económicos chinos en Eurasia no coinciden con los de Estados Unidos. Washington teme un acercamiento económico entre el gigante asiático y Europa, lo que crearía un rival con el que el hegemón estadounidense no podría competir.