En las tierras que una vez formaron el corazón del Imperio Persa, se extiende Irán, un vasto país de unos 1,6 millones de kilómetros cuadrados, cuyo relieve y fronteras naturales le han dotado de una particular configuración estratégica. Desde los montes Zagros, que se alzan imponentes al oeste, hasta los desiertos de Dasht-e-Kavir y Dasht-e-Lut, que se extienden como alfombras áridas en su interior, el paisaje iránie refleja la fortaleza y resistencia de sus habitantes. Al norte, el Mar Caspio forma una frontera acuática, mientras que al sur, el Golfo Pérsico se abre al mundo, ofreciendo una salida geopolíticamente valiosa para sus recursos energéticos.
Desde sus primeras civilizaciones, Irán ha sido un espacio multicultural. Aunque los persas dominan demográficamente, el mosaico étnico del país es variado, conformado también por azeríes, kurdos, árabes, baluchis y otros grupos, cada uno con sus particul
GEOPOL 21
Accede a todo nuestro contenido sin límites y apoya la labor investigadora del think tank que más crece en el mundo hispanohablante.